
Carlos Carretero, uno de los principales inculpados en la 'Operación Karlos', visitó el 'Deluxe' tras haber comparecido ante el juez sobre su implicación en este delito. Tras la declaración de Carretero, la de María José Campanario y la de su madre, Remedios Torres, surgieron los primeros rumores. Muchas informaciones apuntaban que Carretero, cabecilla de la trama, podría haber cambiado su declaración respecto a la implicación de María José y las alarmas se dispararon.
Carretero llegó muy seguro de sí mismo a plató, asegurando que no le daban ninguna pena las lágrimas de Campanario porque "el sufrimiento que ha tenido ella durante cinco años lo hemos tenido todos" e intentando dejar claro que había dicho toda la verdad en el juicio. Eso sí, no quiso pronunciarse sobre si la mujer de Jesulín y su suegra habían hecho lo mismo: "Yo sólo digo que yo he dicho la verdad y que no comparto su declaración, pero hasta ahí puedo decir".
El principal inculpado no tenía muchas ganas de hablar sobre la declaración de Campanario y Remedios, algo que no gustó nada a los colaboradores que comenzaron a creer que algo raro estaba pasando. Algunos lo creían, pero Belén Esteban estaba totalmente segura de ello, por lo que no tuvo reparo en decirle a Carretero todo lo que pensaba sin ningún tipo de rodeos:
"Voy a hacer la pregunta aunque me caiga una demanda. ¿Cuánto te ha pagado el torero para cambiar todo lo que has hecho?", preguntó la Esteban. Carretero, con mucha menos seguridad que al principio le contestó: "Soy de las pocas personas que he mantenido la versión que di inicialmente". Belén no estaba dispuesta a que Carlos se fuera de rositas y continuó su interrogatorio, cada vez más enfadada: "Mentira. Aquí, desgraciadamente, los que tenemos que confiar en la justicia somos nosotros, vosotros lo que estáis haciendo es vergonzoso. Tú no te hablabas con Jesulín, ¿por qué os habéis dado un abrazo?".

Indignadísima, la Esteban aseguró que se estaba mordiendo la lengua, porque no podía decir todo lo que sabía: "¡Cómo me gustaría tirar de la manta, no tenéis vergüenza!". Carretero intentó defenderse asegurando que ya no podía hacer nada más, ya se había declarado culpable y había pactado ante el fiscal, por lo que según él, no podía decir más alto ni más claro que está arrepentido y que reconoce su culpa. Aún así, Belén no se tragó estas palabras e impotente, según ella, por la desvergüenza del invitado, soltó la bomba:
"Tú sí que eres palmero de Jesulín, tú y el Turronero. Es vergonzoso. Ojalá hubiera justicia. Tú prefieres llevarte bien con Jesulín porque vais a construir algo en Ubrique; tú, el Turronero y Jesulín. Se dice, se rumorea. Estoy tan indignada, porque el pez gordo se come al pequeño. Cómo le habéis quitado culpa a su mujer y a su suegra, encima que os lo habéis llevado, pero sólo voy a decir esto, porque si no mañana me van a dar por todos lados, pero es vergonzoso. Los que tienen que dar ejemplo son la justicia, yo no me alegro de que nadie vaya a la cárcel, pero quien la hace que la pague".
Belén Esteban se relajó y cedió el turno de palabra a sus compañeros. Lydia Lozano también fue muy directa y volvió a preguntar a Carretero si, en su opinión, Campanario y su madre estaban faltando a la verdad en el juicio. La respuesta del invitado fue la misma que había dicho minutos antes: "Yo he dicho la verdad y ya has visto que mi declaración se contradice con las suyas. Yo no voy a decir que mienten, a lo mejor no se acuerdan de la verdad".

Carretero contestó a esto asegurando que lo que sucedió en 2006 fue que él avisó a María José Campanario de que su madre no tenía que ir a Cádiz para asistir al reconocimiento médico porque iba a ir otra persona, pero no que fueran a suplantar la identidad de Remedios Torres: "Si a mí me pregunta el fiscal que había suplantación tengo que decir que no, pero cuando me pregunta si sabía que iba a ir otra señora tengo que decir que sí porque está grabado". Para los colaboradores, esto era lo mismo que suplantar la identidad de una persona, pero el invitado defendió que no tenía nada que ver una cosa con la otra.

El segundo tema que quiso comentar Ricardo Sanz fue, precisamente, sobre el presunto apoyo que Carretero podría estar dando a Campanario y su madre para quitarles culpa: "A la vista de que el señor Carretero, cuando le preguntan por temas de la investigación, le echó un capote muy grande a Campanario al no reconocer la suplantación. Por eso ese saludo me sonó raro. El único delito que puede desequilibrar la balanza y llevarla a la cárcel es la suplantación. Entonces, cuando Carretero niega que hubiera suplantación, pienso que este saludo con Jesulín lleva a un pacto".
Fuente:Salvame JENNIFER
No hay comentarios:
Publicar un comentario